En junio de 1931 se celebraban
elecciones a Cortes Constituyentes. Obtuvieron la mayoría una coalición de
republicanos y socialistas. (El PSOE obtuvo 116 escaños, seguido del Partido
Radical de Lerroux, 90 escaños, que se había convertido en un partido de
derecha moderada). El primer cometido de estas cortes era elaborar un nuevo
texto constitucional.
La constitución de 1931
Reflejaba un pensamiento
democrático y avanzado, y buscaba una redistribución de la riqueza y la
creación de un estado del bienestar que alcanzara a toda la sociedad, yendo más
allá de la defensa del liberalismo de constituciones anteriores.
Una de las cuestiones más destacadas fué la consecución del voto para la mujer, logro debido a la infatigable lucha de una mujer, republicana y liberal, que aguantando "carros y carretas", no cejó en el empeño de conseguir lo que se había propuesto.
No fue nada fácil, tuvo que escuchar, chanzas y descalificaciones desde la derecha y desde la izquierda, se quedó sola frente a su partido y fue acusada de poner en peligro a la República por defender el derecho el voto a la mujer, suponiendo que ésta votaría a favor de la derecha.
Clara Campoamor tuvo que ver cómo la otra mujer diputada a Cortes, la radical socialista Victoria Kent, se oponía también a concederle el derecho al voto a la mujer, convencida de que lo utilizaría para votar a la derecha.
A pesar de todo, la igualdad en el voto se aprobó, con el apoyo de la derecha y de una parte del PSOE, mientras el sector de Indalecio Prieto se opuso también.
Los republicanos radicales y los seguidores de Indalecio Prieto todavía intentaron una última jugada, mediante una enmienda transaccional. El derecho al voto de la mujer ya no tendría vuelta atrás. La lucha de Clara Campoamor consiguió que nunca más se planteara esta cuestión. ¡Gracias Clara!
Las reformas del gobierno republicano-socialista: entre la utopía y la realidad
Fue el periodo más activo de la
República en cuanto a reformas, entre las que destacan:
• La reforma laboral llevada
a cabo por el líder de UGT y Ministro del Trabajo, Largo Caballero, que incluía
medidas como el seguro de enfermedad, las vacaciones pagadas, la jornada de
ocho horas en el campo o el establecimiento del salario mínimo. La CNT, que no
quiso colaborar en las reformas, convocó violentas huelgas revolucionarias,
creando una gran inquietud en las clases medias que no veían al gobierno capaz
de controlar la situación.
• La Reforma Agraria
(1932-33) intentó atajar el problema de la redistribución de la propiedad de la
tierra, pendiente desde el XVIII, y que había creado una situación de anarquía
y violencia entre los jornaleros. La complejidad legal y técnica que suscitó la
Reforma, junto con los fuertes intereses de los partidos, la presión campesina, organizada por la CNT y
el PCE en el Sur, y el temor a que la oposición de los terratenientes pudiera
acabar con la República, explican la sucesión de cuatro proyectos desestimados
y el resultado final de una ley compleja y de difícil aplicación. Los empresarios agrícolas se resistieron dejando los campos incultos. "No queríais república, pues comed república"...
• La política educativa: Se continuó la
reforma educativa, basada en el principio constitucional de universalidad y en
el modelo de la escuela mixta, única, pública, laica, obligatoria y gratuita,
así como el ambicioso programa de construcción de escuelas y de creación de
plazas de maestro. Se continuó también con las reformas de la secundaria y los
planes de alfabetización de las “misiones pedagógicas”, que intentaron llevar la cultura al
mundo rural, y con el apoyo al grupo de teatro universitario La Barraca.
Pero no estuvo exento de problemas: intento de golpe de Estado de Sanjurjo, resistencia de la iglesia a las reformas que le quitan privilegios (sobre todo el monopolio de la educación), huelgas insurreccionales convocadas por la CNT... en fin, dificilmente podía soportar un gobierno semejante presión...
El conflicto planteado con la iglesia católica, debido a lo aprobado en la Constitución y a la Ley de Congregaciones religiosas, supuso uno de los problemas más serios del gobierno reformista, en una España mayoritariamente católica. La división social que provoca la política anticlerical del gobierno es innegable.
Sin embargo serían los sucesos de Casas Viejas los que provocarían el fin del gobierno de coalición republicano-socialista, obligando a Azaña a disolver las Cortes y convocar eleciones para el otoño de 1933. En el siguiente vídeo podéis ver un montaje sobre este hecho histórico, desde la perspectiva del anarquismo.
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Hola Guadalupe.
ResponderEliminar¿Podrías decirme de que pelicula o serie están sacado los primerios videos, los de Clara Campoamor luchando por el voto femenino?
Gracias ;)